martes, 13 de julio de 2010

Sigue problema de basura en Cancún


Algunos sectores de la ciudad están sufriendo los problemas generados por la acumulación de basura en las calles ante la falta de servicio en la recoja por la empresa concesionaria Grupo Domos, lo que ha generado desagradables olores para las personas que tienen que pasar frente a los contenedores cuando los hay o los montones formados en las esquinas de las colonias, tornando un ambiente peligroso para niños y adultos ante la presencia de fauna nociva, como roedores, cucarachas, moscas y gusanos de los productos orgánicos en proceso de desconcomposición.


Esta tarde empleados del Grupo Domos se dieron a la tarea de recoger la basura acumulada por más de una semana en el fraccionamiento "Los Corales" de la ciudad de Cancún, provocando las naúseas de los transeúntes, comerciantes y habitantes de los alrededores donde se localizan los depósitos de los diversos edificios y vimos con desagrado que ni ellos podían soportar el hedor generado por el calor a media tarde y que al comprimir la basura depositada en el camión provocarón el derrame de lixiviados en plena calle por donde pasan niños y personas de todas las edades exponiéndose a transportar infecciones hasta el interior de sus casas.

Además, durante la semana que no pasó el camión recolector de basura, los perros y gatos callejeros, pájaros, tlacuaches (aquí la gente los confunde como zorros) y pepenadores se han encargado de romper las bolsas de basura provocando que papeles del baño, toallas feméninas y pañales desechables, cartón y bolsas de plástico se rieguen por las calles generando mal aspecto y sobre todo poniendo en riesgo la salud de la población durante el intenso calor y lluvias de la época de Verano.

A pesar de las recomendaciones de las autoridades municipales para que la gente evite sacar su basura durante los días que no pasan los camiones recolectores, ya es imposible mantener la basura de la cocina y baños en los alredores de las casas, provocando que en forma inconsciente se arroje a la banqueta o en algunos casos con más conciencia, lo coloquen en alto para evitar que los perros de la calle rompan las bolsas y rieguen la basura, pero no contaban también que los pájaros al notar contenido de alimentos en las bolsas, también las tiran y rompen generando que se disemine la basura con el viento.

Esperamos que las autoridades tomen nota de la situación que vive nuestra ciudad con el problema de basura y buscar soluciones compartidas por todos para evitar caer en una contingencia sanitaria.

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